ADORACIÓN A JESÚS SACRAMENTADO
Virgen Santísima, pon en nuestros labios y en nuestro corazón el Magnificat de tu eterna gratitud a Nuestro Dios y Señor, a Jesús, tu Hijo Santísimo y al Espíritu Santo Consolador. Alabado sea Su Santo Nombre. ¡Oh María, Madre de Te bendecimos y glorificamos por todo lo que has realizado en nuestras vidas, por las gracias y dones que nos has obsequiado, por los peligros que de nosotros has apartado, por los portentos que en nuestra existencia has obrado, por Tu Amor, Misericordia y Ternura que nos has prodigado… Adorado y alabado seas por siempre, porque hemos podido contemplar, amar y servir a nuestros seres queridos, por todas las personas que has puesto en nuestro camino, por las alegrías que han aliviado nuestro dolor, por los sufrimientos y penas que nos han permitido valorar más Tu Amor y Tu dolorosa Pasión… Te glorificamos y exaltamos, Por Tu Paciencia infinita, por Tu perdón incondicional; suplicamos Tu Piedad y Clemencia total por nuestra falta de caridad, por el tiempo perdido, por el dinero malgastado, por la palabra inútil y nuestro egoísmo disfrazado de amistad, perdón por las obras interesadas y vacías, perdón por nuestra falta de coherencia y piedad… por nuestros olvidos, descuidos y silencios… por dejarte abandonado en el altar… Dulce Jesús Sacramentado deseamos con toda nuestra alma reparar el mal de nuestros pecados, pensamientos, obras y omisión de este año que se va… y por favor, haz que en este año que está por comenzar tengamos una nueva oportunidad, queremos vivir en humildad, caridad y santidad, no sabemos lo que Tu Bondad nos va a deparar, ni cuanto tiempo nos queda para partir a la casa Celestial, sólo queremos entregarnos y abandonarnos en Tu Divina voluntad. Si la salud y el bienestar nos van acompañar, bendita sea Tu generosidad, concede a la humanidad una era de paz y santidad…, líbranos a todos del mal. Que en cada circunstancia que nos toque pasar, de Ti nos podamos fiar, a fin que todo lo realicemos para la gloria de
|