EXPERIENCIAS PARANORMALES
Hola Corazones. Soy una visitante constante de su hermosa página. Quiero felicitarlas por su hermoso trabajo y excelente labor. Deseo hacer una pregunta: Desde hace varios años, al dormir siento una sensación extraña, como si yo sintiera la presencia de alguien; me duermo y siento que mueven mi cama y me despierto; vuelvo a quedar dormida y cuando estoy en el sueño profundo, siento algo muy pesado encima de mi y no me puedo mover. Perfectamente me doy cuenta de lo que me pasa y no me puedo mover. A veces lo logro después de mucho esfuerzo o me vuelvo a quedar dormida. Por favor, díganme qué puede ser esto y cómo lo puedo evitar. No sucede todas las noches, pero sí es seguido. De antemano gracias y que Dios bendiga sus labores.
RESPUESTA
Padre Jordi Rivero, Oct 2002
Son muchas las personas en mis 25 años de sacerdocio que me han relatado experiencias similares a la suya. Considero que son causadas por el asedio de un espíritu maligno y que tienen su origen en algún contacto con prácticas del ocultismo o la superstición (lectura de manos, tarot, brujería, espiritismo, ouija, etc. Ver sobre esas prácticas en la sección de apologética). No se deje engañar por los que quieren explicar sus experiencias apelando a la parasicología. Si usted sabe que se ha expuesto al pecado en alguna de las áreas mencionadas o si usted ha estado expuesta a personas que lo practican mientras usted estaba en pecado mortal, busque remediar su situación en Cristo.
Remedio. El remedio no puede encontrarse superficialmente. No es cuestión de hacer una oración o un rito y seguir viviendo igual que antes. Hay que ir a la raíz:
1-El arrepentimiento de haber hecho esas prácticas, la confesión y el firme propósito de renunciar a todo pecado.
2-Regresar al Evangelio. Entre de lleno en la vida de Jesucristo en la Iglesia Católica. Participe cada domingo con devoción a la Santa Misa (mas frecuente si es posible), busque conocer su fe y practicarla humildemente según su estado de vida y vocación.
3-Busque si es posible un sacerdote que conozca de esta realidad y pídale que ore por su liberación.
